Contestación por parte del Reino de España por el conflicto del Barco Aquarius:
MADRID 12 DE JUNIO DEL 2018 15:15 hora peninsular
Querida República Italiana:
Muchísimas gracias por tomarse el debido tiempo para escribir la carta y hacérnoslo constar a través de su embajada. El conflicto que está habiendo, es algo que lleva muchos años, y que vivimos desde las costas del sur de Europa. Es un problema que cada vez se hace más grande a la vista y que la solución llegará con una política migratoria comunitaria europea.
Entiendo perfectamente la problemática, pero en España estamos cambiando el rumbo del país y viramos de nuevo a la izquierda. Demasiado tiempo llevábamos con un gobierno en el cual los únicos intereses estaban en corromper las instituciones públicas, crear políticas económicas austeras que venían de Europa, y prohibir hablar a los ciudadanos con la ley mordaza.
Como usted ha sido sincero, le voy a ser franco. Ahora mismo en España vivimos tiempos convulsos en el parlamento y en nuestra sociedad. Y España necesita una imagen internacional y nacional en la cual la solidaridad, la puesta en común y los acuerdos sean lo más importante a día de hoy.
Es por ello que me veo obligado a aceptar este barco, para cumplir los objetivos marcados por Europa y para volver a intentar creer en esta Unión Europea en la que los valores se basaban en la solidaridad entre nuestras naciones.Serán 4 días largos, porque además se aproxima un temporal en el Mediterráneo, pero igualmente tanto ayuntamientos como nuestras comunidades y regiones españolas están abiertos a recibir a nuestros compañeros de África.
Usted debería darse cuenta si es que ya no lo ha hecho, de que en Italia también está ocurriendo. Le encomiendo reflexionar sobre el tema.
Reciba un cálido abrazo por parte del Reino de España.
A la carta de la república Italiana por el conflicto del Barco Aquarius:
ROMA, 12 de junio de 2018 11:15 hora peninsular
Querida España:
Les escribo para aclarar algunos puntos a la luz de lo que está sucediendo a lo largo de estos días en el Mar Mediterráneo. Hace unas horas España, dio luz verde a recibir a los inmigrantes del barco Aquarius para ser desviado al puerto de Valencia. Me gustaría disculparme por lo que está sucediendo, pero no puedo, porque actué conscientemente. Sé las consecuencias de mis acciones, y quizás ésta es la peor parte de la historia.
Me imagino que a veces las personas que se encuentran en ese barco, después de haber cruzado los desiertos africanos y atravesando los campos de detención libios en condiciones inhumanas.Pero no puedo evitarlo, porque del 2 de junio del 2018, mi pueblo ha elegido cambiar, y ahora el ministerio del interior es de La Liga Norte. La extrema derecha que ambos conocimos en el siglo pasado y que nos llevó a la ruina.
El problema no son estos inmigrantes, el problema es que Italia no sabe manejarlos, organizarlos en refugios y reintegrarlos en la sociedad. Como ustedes ya saben, esto es un negocio, y les aseguro que esto produce mucho dinero. La gestión de los residuos y sobornos está ahora pasada de moda, la verdadera moda de hoy es el tráfico de seres humanos. No puedo explicar la densa red de engaño y falta de honradez que se une a algunos partidos italianos políticos. Unido a los centros de acogida, las autoridades regionales y los clanes del crimen organizado con los migrantes.
Puedo decirles en confianza que los números no son un problema, según las estadísticas, puedo darles la bienvenida. Agregue también que sin migrantes Italia habría desaparecido porque los italianos han dejado de tener hijos y estamos en una crisis demográfica total. Tengo que hacerlo, tengo que dejar que se ahoguen en el mar, en barcos o morir de hambre a causa de la ignorancia que en mi país ha superado con creces la luz de la razón, porque el racismo ha derrotado la solidaridad, pero no puedo evitarlo, porque los italianos han decidido también. Es por eso que le pido a la querida España que dé la bienvenida al barco Acuario y a los próximos barcos que llegarán en este largo verano.
Una petición que tengo que pedir, por favor, no se jacten de lo que hicimos, porque en la costa de Marruecos; en Ceuta y Melilla, donde separan a través de un muro de alambres de decenas de metros entre la vida y la muerte.
La humanidad y la destrucción son al menos tanto como en el las costas italianas.
Saludos, República Italiana
*SE PRECISA QUE ES UN ARTÍCULO FICTICIO EN EL CUAL SE INTENTA APROXIMAR A LA REALIDAD Y SITUACIÓN QUE SE ESTÁ VIVIENDO ENTRE ITALIA Y ESPAÑA.